Redactar un testamento es la mejor manera de asegurar que tu patrimonio sea distribuido conforme a tu voluntad y evitar conflictos entre familiares. En México, el testamento más común es el público abierto, otorgado ante notario, el cual brinda seguridad jurídica a los herederos y evita futuros litigios. También existen otras formas de testamento, como el ológrafo (escrito de puño y letra del testador) o el cerrado, que requiere ser depositado ante notario en sobre sellado.
Si una persona fallece sin testamento, la sucesión legítima determina la distribución de bienes según lo establecido en el Código Civil, priorizando a los familiares más cercanos, como cónyuge, hijos y ascendientes. Este proceso puede ser largo y complejo, generando disputas y problemas entre los herederos.
Para evitar complicaciones, se recomienda planificar la herencia con asesoría legal. Un abogado especializado puede ayudarte a redactar un testamento claro y válido, que garantice la correcta transmisión de tus bienes y respete los derechos de todos los beneficiarios.
Nuestros especialistas en derecho sucesorio pueden ayudarte a elaborar un testamento que garantice la protección de tus bienes y la tranquilidad de tus seres queridos. Además, te asesoramos en la correcta administración de herencias y en la resolución de disputas entre herederos.